Envolviéndose en la vida de los hijos
Los padres que se envuelven realmente en la vida de sus hijos reconocen perfectamente los cambios que se producen en cada una de las etapas de desarrollo por las que atraviesan sus hijos.
Estos padres están conscientes que así como en sus hijos se produjeron cambios cuando eran bebés, tales como el aprender a caminar y a hablar, de la misma manera cuando el niño o niña crece y se convierte en adolescente, su actitud cambia y sus patrones de personalidad se modifican de una manera bastante marcada.
Los adolescentes y la disciplina
También es cierto que nosotros como padres nos debemos mantener firmes en cuanto a reglas de disciplina establecidas para nuestros hijos en su edad adolescente y es importante hacer notar que la flexibilidad con respecto a esas reglas funciona bastante bien durante esta etapa de desarrollo.
El adolescente está en busca de su propia identidad y la persona que quiere ser cuando llegue a su edad adulta.
El joven a esta edad está definiendo sus metas, ambiciones y valorando lo que se debe y no se debe hacer para ser aceptado socialmente.
Esta búsqueda de identidad lleva a los adolescentes a tratar de tener más independencia y mayor individualidad y esto algunas veces los hace que quiebren las reglas establecidas por los padres con una mayor agresividad que cuando estaban pequeños.
La flexibilidad que los padres mantengan en este aspecto, es esencial para que el adolescente modifique su actitud ante ellos.
La negociación con los adolescentes
Los adolescentes aman el hecho de negociar con sus padres o sus maestros. Por ejemplo, si sus padres intercambian las buenas calificaciones por la frecuencia en que ellos verán a sus amigos, los adolescentes se verán en la necesidad de obtener mejores calificaciones si quieren frecuentar las fiestas y sus círculos sociales durante los fines de semana.
Una mayor independencia
Los adolescentes en su mayoría se caracterizan por tener que batallar con el conflicto de querer ser independientes y al mismo tiempo el de sentirse protegidos dentro del hogar de sus padres.
Muchos de ellos cuando salen de su edad adolescente lo hacen convertidos en adultos capaces de tomar las riendas de sus vidas en sus manos.
Sin embargo hay otros adolescentes que no resuelven este conflicto y al llegar a su edad adulta cargan sobre sus hombros la inmadurez del adolescente.
El establecer reglas muy estrictas no funciona con el adolescente. Todo lo contrario, las reglas muy fuertes incrementa la hostilidad y resentimiento hacia los padres.
El permitir que los adolescentes sean autosuficientes los hace sentirse bien y seguros de que serán capaces de sobrevivir fuera del hogar cuando crezcan y en caso que necesitaran ayuda podrían encontrarla en casa de sus padres.
Como adquiere el adolescente su seguridad
Cuando el adolescente crece seguro de él mismo no desarrolla, resentimientos ni rencores contra sus padres.
Los padres nunca deberían tratar a sus hijos adolescentes como niños pequeños y deberían dejar que ellos hicieran decisiones en la medida que puedan hacerlo de acuerdo a su capacidad.
Deja un comentario